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Sumérgete en la fascinante arquitectura popular de nuestro municipio, donde corradas, terrados, cabanos y cortines cuentan historias de antaño. En tiempos pasados, las corradas eran espacios cerrados, a veces techados, ubicados cerca de las viviendas. Imagina las casas de antaño con su corral, establos y una corrada. ¡Incluso tenían un terrado donde almacenaban hasta diez cargas de pan!

Cabanos

En nuestro municipio, los cabanos eran construcciones rurales típicas de las zonas ganaderas y montañosas. Eran refugios utilizados por los pastores en las brañas de los puertos y colinas. Aunque hoy en día son escasos, puedes encontrar algunos ejemplos en la braña del Camisón de Santa Cruz o en el camino de Primout, cerca de los corrales para el ganado. Estas estructuras eran comunes en el pasado, ya que los concejos alentaban su construcción para proteger y cuidar a los rebaños. Imagina la vida de los pastores en aquellos tiempos, resguardados en estos acogedores refugios.

Cortines

A pesar de que la producción de miel no fue muy destacada en el Concejo de Ribas de Sil de Abajo, las colmenas se ubicaban estratégicamente en laderas soleadas y secas para evitar que la humedad dañara las cepas. Para protegerlas de los osos, se construían los cortines, recintos circulares hechos de mampuesto, típicos de nuestra zona de esquistos pizarrosos. Si visitas el pueblo de Anllarinos, podrás admirar uno de los mejor conservados, ubicado en una pequeña vaguada en la ladera de la montaña.

No cabe duda de que el encanto de nuestra arquitectura popular, donde cada estructura cuenta una historia única, ha dejado su huella en nuestro querido municipio.