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Con una institución tan ancestral como la iglesia lo normal es que se sigan manteniendo muchos de sus ritos y costumbres. Eso no quiere decir que no haya habido cambios, algunas procesiones religiosas como la de san Antonio de Páramo se han perdido y otras que han modificado su recorrido por completo, como la de las Nieves, que antiguamente iba desde la feligresía al mismo santuario de las Nieves.

Fiesta y romería de San Antonio

Eran unas fiestas que se celebraron hasta hace unos cuarenta años en la era de Mataferrera. Además de los actos religiosos, se daban productos del campo y con ellos se hacían lotes que se subastaban delante de la Picota. Durante la fiesta también se celebraban varios juegos, entre otros la pita ciega, la carrera de la Rosca y el del gallo.

Fiesta del Corpus

Dentro de las festividades religiosas, la del Corpus es una de las de mayor arraigo. Durante la procesión se saca el Santísimo Sacramento bajo palio y en una viril-ostensorio de principios del siglo XVIII. La procesión recorre las calles principales de la villa y el santísimo se detiene en unos pequeños altares decorados con flores repartidos a lo largo del recorrido de la procesión.

Fiesta de las Nieves

Sin duda la de mayor tradición, se celebró y se sigue celebrando en la pradera del entorno del santuario. Lugar de encuentro entre familiares y amigos, de baile, de diversión, de música, de entretenimiento, y sobre de fe en su patrona.

La música tradicional siempre estuvo presente de la mano de excelentes tamboriteros y pandereteras, que con la aparición de las orquestas han ido desapareciendo.

Foto: Grupo de pandereteras con su director artístico. De izquierda a derecha (mujeres): Rosa, Agripina, Segunda, Lucía, Guadalupe y Belmira. Hombres: Matías, Magín, Fidel, Benigno, Germán y Pepe Jerónimo. En el centro y en cuclillas, Benjamín